sábado, 30 de mayo de 2009
El Recuerdo
Evaporada la sangre deja su aroma que me levanta, y me conduce al resplandor de las viejas miradas, de la inclemente adoración de los recuerdos.
Estoy perdido en los recuerdos de una calle mojada, de la lluvia en mi cara, del viento que me acompaña, de un café y del frío, de un callejón y las risas nerviosas.
Estoy perdido en un segundo del pasado, en un libro, una copa, dos anillos, un poco de vino y una sonrisa.
Estoy perdido en un recuerdo...
Estoy perdido, y tan cansado, tan alejado del remoto chispazo que me dio la vida que no tenía.
Estoy perdido.... y no quiero encontrarme
jueves, 21 de mayo de 2009
El joven Lovecraft

martes, 19 de mayo de 2009
Hoguera
Me acusan y me castigan por ser yo un simple caminante, me condenan por ejercer mi profesión. Esa profesión a la que le tienen pánico, malditos borregos de la sociedad. Tienen envidia pues mis manos pueden alterar su frágil orden, me tienen miedo corruptos humanos pues yo no caigo en sus bajesas, me castigan cuando en realidad saben que ustedes deberían ser los castigados.
Las carcajadas se apoderan de mi semblante cuando acercan al piadoso fuego hacia mi, ¿acaso no entienden que yo controlo la realidad y lo que es falso?... el fuego purifica, y además ignoran pequeños humanos, que los fénix se hacen más fuertes cada vez que resurgen triunfantes de las cenizas...
No me destruirán con el fuego, pues es mi amigo y mi aire lo alimenta, soy yo quien le da de comer... No será con el fuego que me destruyan. Y volveré, volveré a caminar como siempre, volveré a hacerles la vida imposible mis pequeños e incautos borregos
lunes, 11 de mayo de 2009
El Sueño de la Pesadilla

Alza la vista, mira el cielo, y por primera vez no sonríe al ver la luna; esa luna, su amada madre lo mira a cada instante, blanca y perlada... pero él no sonríe. Solo mira la luna y clava sus ojos en la cara blanca; alrededor de ella su corte la alaba, esa corte punteada de brillantes alfileres que adoran a la redonda madre blanca.
La tierra se estremece en los pies y en las manos del cansado caminante que mira la luna; el viento golpea su rostro tratando de conmoverlo y el fuego en el corazón de su alma se prepara para eclosionar de un momento a otro.
Los ojos del caminante están cansados. Sus sueños se apagan y distorsionan. No sabe si está dormido o está despierto; no sabe si fue una pesadilla o fue un sueño.
Mira sus manos contra el cielo que se desvanecen, no sabe si le fallan sus ojos o si está despertando. Siente un cosquilleo en sus miembros y su cansado corazón golpea los barrotes rogando que lo liberen. Siente un frío goteante en todo su cuerpo, como si chorros de agua helada se lo quisieran tragar, sus rodillas golpean la tierra y su visión se desvanece, cae su cara con un golpe seco y profundo, la luna lo mira y suspira....
El Sueño se acabó... ¿o fue una Pesadilla?